SII establece fuerte reducción en vida útil de activos

Moderno régimen de depreciación será más rápido que en EE.UU., Canadá, Alemania y otros países más desarrollados que Chile.

Anuncios fueron hechos en conferencia de prensa conjunta por el Director del SII , Juan Toro, y el Secretario Ejecutivo de la Sofofa, Andrés Concha.

El SII cumple así con un compromiso asumido por las autoridades económicas del país e incluido en los objetivos de la Agenda Pro Crecimiento, el cual era esperado y altamente demandado por el sector productivo nacional, dada la importancia que dichas tablas adquieren para efectos de planificar futuras inversiones.

La modernización de las tablas de vida útil constituye una medida que, además de haber sido gestionada por los sectores productivos, tendrá un positivo y fuerte impacto, toda vez que las hasta ahora vigentes tienen aproximadamente 30 años las más antiguas.

Los plazos de depreciación tanto normal como acelerada que ahora se han dispuesto, han sido establecidos en consulta con las organizaciones empresariales, por lo cual reúnen un alto grado de consenso.

Chile se pone así a la vanguardia en términos de incentivo a la inversión por medio de depreciación acelerada, aproximando aún más el impuesto a la renta a un impuesto al consumo. Cabe señalar que con las nuevas vidas útiles activos tan relevantes como edificios, computadores y vehículos se depreciarán comparativamente más rápido que en países como Estados Unidos, Canadá, Alemania, Irlanda, Brasil, México y Corea.

También es significativo que las reducciones establecidas tienen un costo fiscal que en valor presenta alcanzan a los US$ 217 millones. Para los años 2003, 2004 y 2005 el costo fiscal anual se estima en
US$ 16 millones, US$ 43 millones y US$ 28 millones, respectivamente.

Importante reducción de la vida útil de activos.- Como se sabe, la legislación permite rebajar las inversiones de la base imponible del Impuesto a la Renta en un período determinado de años, denominado “vida útil” de tales activos. La resolución emitida por el SII establece una reducción de esa vida útil, tanto normal como acelerada, de los principales activos fijos, adecuándolas más efectivamente con la pérdida de valor que éstos experimentan como consecuencia de los cambios tecnológicos y de mercado.

Entre otros cambios establecidos en la resolución se pueden mencionar los siguientes: la vida útil de maquinarias bajo depreciación normal se reducirá de 20 a 15 años, y bajo depreciación acelerada de 6 a 5 años. En el caso de computadores, la vida útil bajo depreciación normal se reducirá de 10 a 6 años, mientras que bajo depreciación acelerada se reducirá de 3 a 2 años. Para la inversión en construcciones con estructuras de acero, la vida útil bajo depreciación normal se reducirá de 100 a 80 años, en tanto que bajo depreciación acelerada disminuirá de 33 a 26 años.

Fuerte incentivo a la inversión.- Las nuevas reglas de depreciación introducirán un fuerte incentivo a la inversión en activos fijos. Diversos estudios apuntan en el sentido de que mayores tasas de depreciación, disminuyen el costo-usuario del capital, lo que significa que las empresas tienen con ello mayores estímulos para invertir. Hay que tener presente que mientras menos años de depreciación se asigne a un bien, una mayor proporción de su valor se podrá descontar como gasto, postergándose así parte del pago de impuesto desde los primeros a los últimos años de inversión.

A modo de ejemplo, si una empresa invertía $600 millones en maquinaria hasta ahora podía descontar como gasto anual $100 millones (en 6 años de vida útil acelerada). Bajo las nuevas reglas de depreciación, el descuento como gasto anual para una inversión similar se elevará a $120 millones (en 5 años de vida útil acelerada). Considerando una tasa de impuesto a las utilidades de 17%, esta empresa reducirá su pago de impuestos en $3,4 millones anuales durante 5 años.

Avance en simplificación tributaria.- La actualización de las tablas constituye también un avance en términos de simplificación tributaria. En efecto, actualmente existen una serie de circulares y oficios dispersos que fijan la vida útil de los diferentes activos. La nueva tabla refundirá toda esa normativa en una única resolución, que será publicada en el Diario Oficial y que podrá ser consultada fácilmente a través del sitio web del SII (www.sii.cl).

También ha sido frecuente que el SII fije los períodos de depreciación de ciertos activos como respuesta a consultas efectuadas por las propias empresas, en ocasiones respecto incluso de determinadas marcas y modelos. Esto ha traído como consecuencia que para muchos activos no existiese un plazo establecido por el SII, en la medida en que jamás hubo consultas al respecto. También sucede que algunos contribuyentes no tienen claridad respecto de a qué activos asimilar uno propio, en función de las tablas hasta ahora disponibles, produciéndose en ocasiones diferencias de criterio entre la empresa y la administración tributaria.

Estos aspectos se clarifican en la nueva normativa porque las nuevas tablas de depreciación hacen una clasificación más precisa de las familias de activos, aplicando categorías genéricas, de tal forma que cualquier activo pueda ser asimilado a alguna de esas categorías.

Ejemplos de depreciación en el antiguo y nuevo escenario y ahorro de impuestos para las empresas

Ejemplo 1:

Una empresa invierte en una construcción cuyo costo de inversión es de $1.000 millones. Anteriormente la vida útil de este activo era de 100 años, pudiendo depreciarse aceleradamente en 33 años. Es decir, se podía rebajar de la utilidad como gasto de depreciación una cantidad anual de $30.303.030. Con la nueva tabla la vida útil se reduce a 80 años, lo que aceleradamente se traduce en 26 años. Por lo tanto, se podrá rebajar como gasto de depreciación una cantidad anual de $38.461.538. En consecuencia, esta empresa hipotética aumentaría el gasto por depreciación en $8.158.508 anuales durante 26 años, lo que aumenta la rebaja (ahorro) de impuesto de primera categoría por depreciación en un 27%. En efecto, considerando una tasa de impuesto de Primera Categoría de 17% anual, esta mayor depreciación representa un ahorro de impuestos anuales de $1.386.946 durante 26 años.