Santiago, 17 de Abril de 2015
SII la calculó en 22,2%:
Evasión del IVA en la economía bajó 2 puntos durante el 2014
  • Se trata de uno de los principales indicadores de gestión de las administraciones tributarias.
  • Resultado se atribuye a la modernización y mejora de procesos internos del SII, a la aplicación del nuevo modelo de fiscalización y al potenciamiento de la persecución penal del delito tributario.

El Servicio de Impuestos Internos informó hoy que la tasa de evasión del Impuesto al Valor Agregado en la economía llegó el año pasado a un 22,2%, equivalente a unos US$5.797 millones anuales (tipo cambio promedio 2014 US$570,01).

Así se desprende de los resultados de un trabajo que acaba de concluir la Subdirección de Estudios del organismo, que permitió realizar una nueva estimación de la serie de evasión del IVA para el período 2003-2014, sobre la base de las últimas estadísticas de cuentas nacionales publicadas recientemente por el Banco Central.

De este modo, la revisión de las cifras actualizadas por el Instituto Emisor permitió recalcular la serie de evasión del Impuesto al Valor Agregado para los años 2003-2013, e incorporar la estimación para el 2014, tal como se refleja en la siguiente tabla:
 

Tabla: Serie 2003 – 2014 Tasa y Monto Evasión de IVA
Base Referencia MIP 2008

Año Tasa Evasión Monto Evasión ($MM)
2003 18,0% 895.050
2004 18,1% 1.013.521
2005 16,7% 1.063.592
2006 15,9% 1.115.231
2007 14,8% 1.172.019
2008 22,5% 2.047.620
2009 20,2% 1.814.860
2010 22,2% 2.300.862
2011 23,6% 2.793.576
2012 24,8% 3.241.982
2013* 24,3% 3.431.739
2014* 22,2% 3.304.265

Fuente: Subdirección de Estudios, SII
(*) Cifras preliminares

 

Metodología y resultado 2014

La evasión se define como la diferencia entre la recaudación teórica (aquella que se obtendría si todos cumpliesen con sus obligaciones tributarias) y la recaudación efectiva. La tasa de evasión expresa esta diferencia como porcentaje de la recaudación teórica.

La metodología utilizada es conocida como la del IVA no deducible, que tiene por objetivo estimar, a partir de agregados macroeconómicos, el monto total de las transacciones que generan IVA, que posteriormente no da derecho a crédito fiscal dentro de la cadena de valor agregado.

De este modo, y sobre la base a la información de Cuentas Nacionales del Banco Central, se ha estimado que la tasa de evasión del IVA para el año 2014 disminuyó algo más de 2 puntos porcentuales, situándose en 22,2%.

La disminución en la tasa de  evasión del IVA del año pasado es la más importante observada en la última década, después de la verificada el año 2009, la que respondió a la transición esperada producto de la recuperación económica tras la crisis subprime.

En los hechos, la menor evasión implica un aumento en la recaudación que supera los $310.000 millones, cifra significativamente mayor a la meta fijada por este concepto en el informe financiero de la Reforma Tributaria para el año 2014, que se estimó inicialmente en $230.928 millones.

El resultado obtenido ha sido fruto de un esfuerzo institucional encauzado hacia un mejoramiento de su gestión, que ha sido posible debido a las acciones de fortalecimiento institucional que ha emprendido este Servicio.

En este aspecto destacan la aplicación del nuevo Modelo de Fiscalización basado en la adecuación de las distintas acciones de detección, control y atención de contribuyentes en conformidad a su riesgo característico, otorgando mayor efectividad a la acción fiscalizadora; así como la intensificación de las tareas de persecución al Delito Tributario, factores que han incidido en una mayor sensación de riesgo y control de los potenciales evasores de impuestos.

De igual forma, en una línea complementaria, el potenciamiento de las acciones de Facilitación del cumplimiento tributario, materializadas a través la creación de una nueva Subdirección de Asistencia al Contribuyente, se han orientado a incrementar la entrega de apoyo, información y asistencia a los contribuyentes en su cumplimiento tributario.

Este nuevo enfoque de gestión ha estado enmarcado en una estrategia institucional que, en términos simples, plantea que para alcanzar el objetivo de maximizar el cumplimiento tributario, o equivalentemente, disminuir la evasión, es necesario tener una fiscalización cada vez más efectiva, y conjuntamente con ello, abordar una serie de factores que deben ser gestionados de manera mancomunada, con el objeto de incidir en el comportamiento de los contribuyentes, y en consecuencia, en su grado de cumplimiento tributario.