El Servicio de Impuestos Internos fundó su recurso, expresando que los sismos acaecidos en abril de 2014 - base fáctica de la rebaja- ocurrieron cuando la causa se encontraba en estado de dictar sentencia, después de fijados los hechos debatidos, a lo que había de agregarse que el procedimiento de reclamo contra la tasación derivada de un procedimiento general de avaluación de predios estaba contemplado en el artículo 149 del Código Tributario sólo para las causales de sus cuatro numerales, señalando que otras, como la de la especie, serían rechazadas de plano, procediendo sobre dicha materia, una solicitud administrativa de rebaja con los antecedentes que la ameritaran. Asimismo, sostuvo, que el vicio de ultra petita se había producido, además, porque la señalada rebaja no había sido sometida al conocimiento del juez recurrido, además de no fundarse en normal legal ni conocimiento técnico específico, y tampoco en otros antecedentes que respaldaran su monto, que no fueran unas fotografías, las que sólo daban cuenta de daños menores. Luego, el Servicio agregó que el objeto del juicio era determinar si la tasación del predio se había hecho o no de acuerdo a las normas y cálculos técnicos; que la Circular Nº 7 de 2013 citada por el a quo, lo facultaba a realizar una rebaja, pero no al juez tributario, y que al efectuarla en el fallo, éste había quedado en la indefensión al no darle tiempo a discutirlo.
La Corte indicó que habiéndose trabado la litis respecto de los hechos técnicos específicos materia del debate contenidos en la interlocutoria de prueba, y encontrándose dictado el decreto autos para fallo, el juez a quo incorporó un hecho nuevo y distinto a los alegados por las partes por la vía de decretar medidas para mejor resolver, sin indicar específicamente cuál disponía de las señaladas en el artículo 159 del Código de Procedimiento Civil, aplicable por las remisiones de los artículos 148 y 151 del Código Tributario, pues sólo las invitó a manifestar si efectivamente la propiedad sub lite había experimentado daños o detrimentos con motivo de los sismos acontecidos en esa ciudad, y a acompañar fotografías y antecedentes que lo acreditasen, y en base a ello había dispuesto la rebaja cuestionada, incurriendo en el vicio de ultra petita alegado.
Además, la Corte indicó que se infería que el contribuyente o el interesado debían pedir la rebaja al servicio indicado en un procedimiento administrativo, por lo no era de competencia del juez tributario decidir de oficio tal rebaja, sino que luego de realizado aquél, y una vez dictada la resolución administrativa correspondiente, conocía de ella la judicatura indicada si las partes optaban por recurrir a ella.
El texto de la sentencia es el siguiente:
Iquique, veintiocho de enero de dos mil quince.
VISTO Y TENIENDO PRESENTE:
PRIMERO: Que, contra la sentencia definitiva de primer grado de 19 de mayo de 2014, escrita a fojas 111 y siguientes, complementada el 20 de octubre del mismo año a fojas 171 y 171 vuelta, apeló la reclamada Servicio de Impuestos Internos, en la parte que aplica una rebaja a las contribuciones ascendente a un veinte por ciento (20%) de la tasación fiscal del predio sub-lite, rol de avalúos 85-130, en virtud de los sismos que afectaron a la ciudad, incurriendo, según la recurrente, en el vicio de ultra petita, dejando de manifiesto errores de derecho en el fallo impugnado, solicitando se revoque tal decisión y se niegue lugar al reclamo presentado por la actora y contribuyente XXXXS.A., con costas.
Fundó su recurso, expresando que los sismos acaecidos en abril de 2014 - base fáctica de la rebaja- ocurrieron cuando la causa se encontraba en estado de dictar sentencia con el decreto “autos para fallo” de 6 de febrero de 2014, esto es, después de fijados los hechos debatidos, a lo que ha de agregarse que el procedimiento de reclamo contra la tasación derivada de un procedimiento general de avaluación de predios está contemplado en el artículo 149 del Código Tributario sólo para las causales de sus cuatro numerales, señalando que otras, como la de la especie, serán rechazadas de plano, procediendo sobre dicha materia, afirma, una solicitud administrativa de rebaja con los antecedentes que la ameriten.
Sostuvo, que el vicio de ultra petita se ha producido, además, porque la señalada rebaja no fue sometida al conocimiento del juez recurrido, además de no fundarse en normal legal ni conocimiento técnico específico, y tampoco en otros antecedentes que respalden su monto, que no sean unas fotografías de los galpones, las que sólo dan cuenta de daños menores.
SEGUNDO: Que, en estrados, el apelante reprodujo sus argumentos agregando que el objeto del juicio era determinar si la tasación del predio se hizo o no de acuerdo a las normas y cálculos técnicos; que la Circular Nº 7 citada por el a quo, faculta al Servicio de Impuestos Internos a realizar una rebaja, pero no al juez tributario, y que al efectuarla en el fallo, su parte quedó en la indefensión al no darle tiempo a discutirlo.
La parte reclamante, por su parte, solicitó mantener la rebaja dispuesta por el a quo, porque a la fecha de interposición de la demanda, los sismos no habían ocurrido, aplicando el juez un principio de economía procesal de acuerdo a las facultades que le confieren los artículos 132 del Código Tributario y 10 de la Ley 17.235, tratándose tales eventos de un hecho público y notorio.
TERCERO: Que, según emana de los antecedentes tenidos a la vista, esta causa se inició mediante reclamo presentado por XXXXS.A., de acuerdo a las reglas del procedimiento especial de reclamaciones de los artículos 149 a 154 del Código Tributario, en contra del Servicio de Impuestos Internos, y por las materias técnicas previstas en el numeral 2 del artículo 149 señalado, relativas al reavalúo de contribuciones del galpón rol 85-130, que se siguió por el Tribunal Tributario y Aduanero en todos sus trámites, hasta dictar la resolución “autos para fallo” el 6 de febrero de 2014, como se lee a fojas 89, decretando a fojas 99, el 8 de abril de 2014, como medida para mejor resolver y en atención a los recientes sismos que afectaron la ciudad, que dentro de 10º día hábil las partes expresaran si la construcción de la propiedad rol 85-130 resultó deteriorada, menoscabada o comprometida, acompañando fotografías o antecedentes del caso, decisión que pidió reponer la apelante, siendo desechada por el a quo, quien llamó a conciliación a fojas 107, la que no prosperó, según consta a fojas 109, dictando a fojas 111 la sentencia definitiva materia de este recurso, otorgando la rebaja cuestionada, la que complementó por instrucción de este tribunal a fojas 171.
CUARTO: Que, de lo expuesto se sigue que efectivamente, habiéndose trabado la litis respecto de los hechos técnicos específicos materia del debate contenidos en la interlocutoria de prueba de fojas 39 y 63, y encontrándose dictado el decreto autos para fallo, el juez a quo incorporó un hecho nuevo y distinto a los alegados por las partes por la vía de decretar medidas para mejor resolver, sin indicar específicamente cuál disponía de las señaladas en el artículo 159 del Código de Procedimiento Civil, aplicable por las remisiones de los artículos 148 y 151 del Código Tributario, pues sólo las invitó a manifestar si efectivamente la propiedad sub lite había experimentado daños o detrimentos con motivo de los sismos acontecidos en esta ciudad, y a acompañar fotografías y antecedentes que lo acreditasen, y en base a ello dispuso la rebaja cuestionada, incurriendo en el vicio de ultra petita alegado.
QUINTO: Que, en efecto, si bien la resolución del a quo parece plausible desde la perspectiva del contribuyente afectado por posibles detrimentos causados por eventos de la naturaleza y que inciden en la determinación de la base de cálculo de un impuesto, como el de la especie, no lo es desde la perspectiva del racional y justo procedimiento que la Constitución Política demanda, y que en este punto guarda relación con varios principios interrelacionados, como lo son, entre otros la competencia del tribunal en los términos amplios de su artículo 7º; el derecho a ser oído y la bilateralidad de la audiencia, pues se incorporaron hechos a la litis no discutidos por las partes una vez que la contienda estaba trabada y clausurado el debate, contrariando el principio de congruencia: “Principio normativo que exige la identidad jurídica entre los resuelto, en cualquier sentido, por el juez en la sentencia, y las pretensiones y excepciones planteadas por las partes “y que se materializa como atributo de la sentencia determinado por la coherencia entre las pretensiones delimitadas por las partes y el dispositivo de ella (Maximiliano Call Loggiard, Principio de Congruencia en los Procesos Civiles). Tal principio se encuentra positivado, entre otras, por la norma del artículo 160 del Código de Procedimiento Civil, que dispone que “Las sentencias se pronunciarán conforme al mérito del proceso, y no podrán extenderse a puntos que no hayan sido expresamente sometidos a juicio por las partes, salvo en cuanto las leyes manden o permitan a los tribunales proceder de oficio”, circunstancia esta última que no concurre.
SEXTO: Que, no obsta a lo concluido, lo manifestado por el a quo en la sentencia complementaria de 20 de octubre de 2014, en cuanto fundó la rebaja en análisis en las normas de la circular Nº 7 de la Subdirección de Avaluaciones del Servicio de Impuestos Internos de 6 de febrero de 2013; en el Decreto Supremo Nº 918 del Ministerio del Interior y Seguridad Pública de 3 de abril de 2014, que decretó el estado de catástrofe en esta Región por el sismo de gran magnitud que la afectó; y en los incisos 10 y 15 del artículo 132 del Código Tributario, pues, claramente la norma administrativa citada dispone expresamente, que ante situaciones que afecten negativamente el valor del terreno, se permite la aplicación excepcional de ajustes de su avalúo, la que debe ser solicitada por el contribuyente de manera fundamentada, aportando todos los medios de prueba que demuestren objetivamente la condición de menor valor del inmueble, indicando la situación o el factor que origina esta pérdida de valor, agregando que con los antecedentes disponibles, más los que corresponda requerir, en caso necesario, al interesado, municipalidad u otra entidad, el Servicio resolverá la aplicación de un ajuste proporcional al detrimento del valor determinado.
De la norma referida se infiere claramente que el contribuyente o el interesado deben pedir la rebaja al servicio indicado en un procedimiento administrativo, por lo no es de competencia del juez tributario decidir de oficio tal rebaja, sino que luego de realizado aquél, y una vez dictada la resolución administrativa correspondiente, tocará conocer de ella a la judicatura indicada si las partes optan por recurrir a ella, no resultando atingentes al punto en análisis las normas del artículo 132 citadas por el a quo, ni la invocación de circunstancias extraordinarias como el estado de catástrofe declarado por Decreto Supremo.
SEPTIMO: Que, en consecuencia, habiendo incurrido el juez a quo en una infracción al principio de congruencia al dictar el fallo en alzada y su complemento, en lo que respecta a la rebaja del 20 % del valor de la construcción- único punto respecto del cual esta Corte resulta ser competente- debe acogerse la apelación deducida a su respecto, pues si bien de acuerdo a las reglas generales constituye un vicio de ultra petita impugnable mediante casación en la forma o invalidación de oficio, por expresa disposición del artículo 140 del Código Tributario, el mismo debe ser corregido por esta vía,
Por estas consideraciones, normas citadas, y de conformidad, además, con lo dispuesto en los artículos 140, 148 y 151 del Código Tributario y artículos 160 y 186 y siguientes del Código de Procedimiento Civil, SE ACOGE LA APELACIÓN y SE REVOCA, sin costas del recurso, la sentencia apelada de diecinueve de mayo de dos mil catorce escrita de fojas 111 y siguientes, y su complemento de veinte de octubre del mismo año, escrita a fojas 171 y vuelta, sólo respecto de la decisión III, que impuso al Servicio de Impuestos Internos la obligación de rebajar a contar del primer semestre de 2014, el 20% del valor de la construcción de $ 1.429.442.666, del inmueble rol 85-130, actualizado al 1 de enero de 2014.
Regístrese y devuélvase.”